"Quiero paz": la fuerte confesión de Maradona a un sacerdote tiempo antes de morir
La muerte de Diego Maradona ha dado de que hablar por todo el mundo, pero pocos saben que en 2019 "El Diego" como lo llaman los argentinos, quiso volver a acercarse a Dios. En los últimos días, varios testimonios han resonado en torno a la situación personal que Pelusa vivía y también en cuanto al entorno. ¿Hay alguien que sea culpable de su fallecimiento? Es lo que la Justicia está investigando. Lo cierto es que el sacerdote Gustavo Rubio, el último que bendijo al crack de la Selección Argentina, reveló qué fue lo que le confesó: "Quiero paz".
Lo ocurrido con Maradona, el pasado miércoles 25 de noviembre, ha dado la vuelta en todas partes y la duda gira a si se pudo haber hecho algo más para evitar su muerte, que fue provocada debido a un paro cardiorrespiratorio. De acuerdo a los reportes de la autopsia, nada tuvo que ver con la operación que le hicieron en la cabeza debido a un hematoma subdural.
¿Qué le pasaba a Diego en el último tiempo? Según comentó el último sacerdote que lo bendijo y que ejerce en la parroquia María Auxiliadora en Berisso, en septiembre de 2019, Maradona lo convocó para asistir al predio de Gimnasia y Esgrima La Plata. En diálogo con Radio 10, relató: "Pensé que pidió que me llamaran para sacar la 'mufa' del club, pero me equivoqué. Me sorprendió lo que me dijo cuando nos encontramos, me pidió que bendijera de parte de Dios a todo el equipo, pero en especial a él para su vida, para lo que viviera de ahí en adelante. Tanto en Gimnasia como con todo".
"Él nos recibió y me llevó aparte, donde charlamos solos. Le di el sacramento y lo bendije. Después hice lo mismo con Estancia Chica y los equipos. Para mí fue muy fuerte. Maradona es tan grande como persona, como jugador. Realmente, me emocionó mucho verlo pequeño con esta necesidad de decir ‘quiero paz’, para estar bien y vivir la vida", añadió el cura.
La confesión de Maradona a un sacerdote que lo bendijo tiempo antes de morir:
Gustavo Rubio, cura de la parroquia María Auxiliadora en Berisso, le contó a Radio 10 qué fue lo que Diego Maradona le confesó en septiembre de 2019: "Me dijo ‘uy, el aceitito’. Me contó que su mamá, Doña Tota, cuando la vida se le ponía muy dura, ella iba a la parroquia y el cura le daba ‘el aceitito’ para salir adelante. Se emocionó mucho. Le di la unción. Me dijo que estaba muy agradecido con la vida, con Gimnasia y que lo único que él quería era paz".
Incluso, el sacerdote indicó que el mejor futbolista de todos los tiempos se mostró apenado por algunas acciones que tuvo a lo largo de su vida: "'Yo me mandé muchas cagadas en la vida y me arrepiento. Pero también tuve cosas buenas en la vida', me dijo. Habló de afecto y del fútbol. Es de grande poder reconocer las macanas que uno se manda. Me dijo que no era ejemplo para nadie. A mí se me hizo muy importante que él quisiera reconocer sus límites y su pequeñez, pero que buscara levantarse y seguir para adelante".
Asimismo, el cura resaltó que Maradona no dejaba de recordar a su madre Doña Tota y a su padre Don Diego: "Diego me habló de los padres con mucha admiración, cariño y emoción, se le llenaron los ojos de lágrimas. Me contó que la vuelta a la Iglesia estuvo inspirada por la vida y la fe de su madre. Una de las cosas que aprendió de ellas fue la fe sencilla, simple, y que la quería poner en práctica. Doña Tota era muy religiosa y ponía todo ‘en manos de Dios’, según decía él. Le daba cátedra de la vida religiosa a sus hijos".